AENOR 45 ISF: ¿Cuál fue el mayor reto que encontraron? BP: Lo más difícil fue convencer a las personas involu-cradas de que el sistema está trabajando para ellos, y no al revés. Una vez que hayan superado este obstáculo, se debe asegurar que las personas están “comprometidas”, y todo lo demás vendrá en forma natural. ISF: ¿Cuántas personas trabajaron en el proyecto? BP: Disponíamos de un grupo de seis personas para apli-car la norma, pero ahora tenemos sólo dos personas a tiempo completo para la gestión de la calidad. Es verdad que contamos con otras cuatro para mantener el siste-ma (formación, supervisión, asistencia técnica, auditoría, apoyo, encuestas, etc.). ISF: ¿Cuáles fueron los principales resultados e impactos? BP: Tuvimos una serie de resultados positivos: uso óptimo de los recursos (tiempo, dinero, suministros); rendimiento mejorado (clientes, proveedores y personal más contento que está feliz de haber logrado los resultados esperados en el marco del tiempo asignado); compilación de un his-torial de la empresa (documentamos los conocimientos y experiencia adquirida en todos nuestros procesos; y a través de nuestro personal fuimos capaces de aplicar lo que habíamos aprendido para optimizar y agilizar la for-ma cómo ha funcionado el parque); generación de datos y toma de decisiones informadas basadas en análisis; y establecimiento de una mayor equidad y justicia, y trans-parencia en todos los procesos. ISF: ¿Tiene algún consejo o recomendación para los usuarios de la Norma ISO 9001? BP: Al igual que con cualquier proyecto, la implemen-tación de la Norma ISO 9001 requiere un conocimiento en profundidad del documento y lo que representa, que luego debe ser comunicado de manera efectiva en toda la organización con todas sus ventajas y beneficios. Pero también hay que apoyar a los que utilizan el sistema de gestión mediante el fortalecimiento de sus conocimien-tos sobre el sistema y sus beneficios, y su optimización de forma continua. De esta manera, se consigue que sea más flexible y práctico, y por lo general más fácil de imple-mentar. En otras palabras, hacer que el sistema funcione. El verdadero reto es conseguir que el sistema sea un fiel reflejo de la realidad y que la realidad refleje el siste-ma, de modo que la mayoría de los principios básicos de la Norma ISO 9001 puedan ser parte de la vida laboral diaria de cada miembro del personal. Esto también ase-gura que las auditorías, inspecciones y controles aleato-rios se puedan llevar a cabo sin desperdiciar tiempo en su preparación. En lugar de ello, cualquiera que evalúe el sistema debe ser capaz de entender cómo funcionan las cosas de inmediato. l
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